Las tradiciones y actividades característicos de las fallas y su importancia en las comisiones

Introducción

Origen y significado de las fallas

Las fallas son una celebración tradicional y popular originaria de la Comunidad Valenciana, España. Cada año, durante la semana del 19 de marzo, las calles se llenan de colorido y alegría para dar paso a esta festividad.

El origen de las fallas se remonta al siglo XVIII y tiene sus raíces en la tradición de los carpinteros, quienes quemaban los restos de madera utilizados en invierno para iluminar sus talleres antes de la llegada de la primavera.

Con el tiempo, esta práctica se convirtió en una competencia amistosa entre gremios para ver quién construía la falla más alta y espectacular. Hoy en día, las fallas son mucho más que monumentos efímeros, ya que se han convertido en un símbolo de identidad y orgullo para los valencianos.

Importancia de las comisiones falleras

En cada barrio o localidad, existen comisiones falleras encargadas de organizar y financiar las fallas.

Estas comisiones están formadas por vecinos y vecinas comprometidos con su comunidad y con la preservación de esta tradición. La implicación de las comisiones es fundamental para llevar a cabo todas las actividades y eventos relacionados con las fallas.

Las comisiones falleras se encargan de la elección del artista que se encargará de la construcción del monumento, así como de la organización de las verbenas, desfiles y demás actos festivos que se llevan a cabo durante la semana fallera.

Además, también se responsabilizan de la recaudación de fondos necesarios para financiar todas estas actividades.

Las tradiciones de las fallas

Plantà de las fallas

El proceso de construcción y montaje de las fallas se conoce como la «plantà«. Durante esta etapa, los artistas falleros trabajan arduamente para dar vida a los monumentos.

La «plantà» comienza días antes del 19 de marzo, y es todo un espectáculo ver cómo se levantan las impresionantes estructuras de cartón, madera y otros materiales. Las calles se llenan de actividad y emoción mientras los monumentos crecen y toman forma.

Una vez finalizada la construcción de las fallas, llega el momento de la «cremà» (quema), donde se prenden fuego a los monumentos como parte de la tradición. Esta quema simboliza el fin de la fiesta y también es un acto de purificación y renacimiento.

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Las mascletàs

Las mascletàs son uno de los momentos más esperados y característicos de las fallas. Se trata de un espectáculo pirotécnico que consiste en una secuencia de petardos y fuegos artificiales que se disparan a ritmo de música.

Cada día, durante la semana fallera, se celebra una mascletà en la Plaza del Ayuntamiento de Valencia, donde miles de personas se congregan para disfrutar del estruendo y la espectacularidad de este evento.

Las mascletàs son una tradición arraigada en las fallas y simbolizan la capacidad de los valencianos para hacer ruido y destacar en medio de la multitud.

Además, el ruido y las vibraciones de las mascletàs también se consideran un homenaje a San José, patrón de Valencia, cuya festividad se celebra el 19 de marzo.

La Ofrenda de flores

Falla ardiente rodeada de coloridas comisiones festivas

La Ofrenda de flores es otro de los momentos más emotivos de las fallas. Durante dos días, miles de falleros y falleras se agrupan por comisiones y desfilan hacia la Plaza de la Virgen, donde ofrecen ramos de flores a la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia.

Este acto simboliza el agradecimiento y la devoción hacia la Virgen, a quien se le pide protección y bendiciones para el año venidero.

La Ofrenda de flores es una tradición que combina la religiosidad con el colorido y la belleza de las falleras vestidas con sus trajes regionales. Cada comisión aporta su granito de arena para crear un impresionante manto floral que envuelve a la imagen de la Virgen de los Desamparados.

Las actividades durante las fallas

Desfiles y cabalgatas

Los desfiles y cabalgatas son una parte esencial de las fallas y atraen a miles de personas de todas las edades. Durante la semana fallera, se realizan desfiles tanto diurnos como nocturnos en los que participan las diferentes comisiones falleras y grupos de música y danza.

Estos desfiles recorren las calles principales y cuentan historias relacionadas con la temática de cada falla.

Las cabalgatas también son momentos esperados por todos, especialmente por los más pequeños. En ellas, se lucen los ninots infantiles, que son las figuras creadas por y para los niños. Estas cabalgatas animan las calles y dan vida a la fiesta, con carrozas, música y mucha alegría.

Concursos y premios

Durante las fallas, se celebran numerosos concursos y se otorgan premios a los mejores monumentos, indumentarias, iluminaciones y otras categorías.

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Estos concursos y premios son una forma de reconocer el esfuerzo y el talento de las comisiones falleras y de los artistas falleros. Además, también generan una competencia sana y fomentan la creatividad y la innovación en el ámbito fallero.

Los premios más destacados son el Ninot Indultat, que se salva de la quema y pasa a formar parte del Museo Fallero, y la Falla Mayor e Infantil, que son las que reciben mayor reconocimiento por su calidad artística y estética.

Conclusiones

Las tradiciones y actividades de las fallas son fundamentales para entender la importancia de esta festividad en la Comunidad Valenciana. La construcción de las fallas, las mascletàs, la Ofrenda de flores, los desfiles y los concursos son momentos que llenan de vida y alegría las calles y que generan un sentido de pertenencia en la comunidad.

La construcción de las fallas es uno de los aspectos más destacados de esta festividad. Durante meses, los artistas falleros trabajan en la creación de monumentos de cartón, madera y corcho que representan escenas satíricas y críticas de la sociedad. Estas fallas se exponen en las calles y plazas de la ciudad y son quemadas la noche del 19 de marzo, en la conocida como la «cremà».

Las comisiones falleras, como pilares fundamentales de esta tradición, se encargan de mantener viva la llama fallera y de transmitir los valores de trabajo en equipo, esfuerzo y dedicación.

Las fallas no solo son una fiesta, sino una forma de preservar la identidad y la cultura de la región, manteniendo vivas las tradiciones y promoviendo el espíritu comunitario.